En el marco del 94° aniversario de su muerte, este miércoles en una ceremonia en el Cementerio General se colocaron las primeras piedras que serán la base para recuperar una plazoleta en su honor, ubicada a tan solo metros de la tumba donde yacen los restos del multifacético y prolífico líder social, político y sindical que invirtió, prácticamente, toda su vida (6 de julio, 1876- 19 diciembre 1924) en transformar la sociedad de su época, defendiendo el progreso y emancipación de la clase trabajadora, promoviendo la consciencia y unidad de clases, creando medios de prensa obrera, impulsando el teatro obrero y promoviendo la cultura popular en general en los albores del siglo XX.
Tras unos tres años de gestiones conjunta entre del Centro de Extensión e Investigación Luis Emilio Recabarren (Ceiler), el Sindicato de Trabajadores a Honorarios de la Municipalidad de Recoleta, el propio municipio de Recoleta, la CUT Chile y el Cementerio General, se logró dar luz verde al proyecto que implica recuperar una plazoleta patrimonial ubicada en el sector que llevará el nombre de Luis Emilio Recabarren. Se estima que el próximo año será inaugurada.
El acto en el Cementerio General, partió con una obra de la compañía teatral La Recoleta, recreando las precarias y paupérrimas condiciones de los trabajadores y trabajadoras del Chile de fines del siglo XIX y principios del XX que tenían largas y extenuantes jornadas laborales a cambio de miserables salarios. Una época marcada por la explotación de los sectores más empobrecidos del país y el surgimiento de los movimientos obreros y sus luchas reivindicativas. Sin duda, y en eso hay acuerdo entre los historiadores, difícilmente se puede concebir el desarrollo de estos movimientos de lucha social, sin tener en cuenta la vida y obra de Recabarren: Obrero tipógrafo nacido en Valparaíso, fundador de 11 medios de prensa obrera como “El Despertar de los Trabajadores” y el semanario “La Democracia”; fundador del Partido Comunista de Chile; fue el primer diputado obrero del país y América (mayo 1906) y dio impulso también al teatro obrero, creando en 1912 el grupo teatral “Arte y Revolución”.
Sergio Troncoso, director del Ceiler manifestó su alegría por concretarse este proyecto en el Cementerio General: “Estamos contentos porque este es un gran logro. Cuando el Cementerio realiza estas visitas (tour diurnos y nocturnos) ya este próximo año vamos a tener una plazoleta muy hermosa, muy vistosa para que tanto extranjeros como compatriotas puedan saber exactamente el sitio donde está el padre del movimiento sindicato, Luis Emilio Recabarren, el más preclaro, el guía y maestro del movimiento obrero chileno”.
Tatiana Cares, presidenta de los trabajadores a Honorarios del ayuntamiento de Recoleta y consejera nacional de la CUT, explicó que esta iniciativa: “Nace hace varios años de diferentes organizaciones. La idea es recuperar está plazoleta y sea el lugar donde se pueda rendir homenaje permanente al padre del movimiento obrero chileno”.
Raschid Saud, director del Cementerio General, señaló que: “Es una iniciativa de la que nosotros somos impulsores también que, año a año recibimos la romería a Luis Emilio Recabarren. Creemos que es un justo homenaje que tenemos que hacer”.
Bárbara Figueroa, presidenta de la CUT, también presente en el acto, valoró este proyecto porque: “Se hace cargo también de una reivindicación que, por muchas décadas, llevan algunas organizaciones y actores del mundo sindical por tratar de reivindicar la figura de un sindicalista ejemplar quien fuera el padre del movimiento obrero en Chile (…) De alguna manera, es volver a darle vida a esta consciencia de clase. Es volver a restituir un lugar importante dentro de la historia, dentro de lo que recoge un espacio como el Cementerio General que es la historia, la tradición y el recuerdo de grandes luchadores y luchadoras de nuestra patria. Y darle también en ese espacio, un lugar, a la voz del movimiento sindical es algo para nosotros que no solamente es un privilegio sino que además nos llena de orgullo”.
La dirigente, destacó la figura de Recabarren por su “tesón por avanzar en la construcción de un movimiento sindical unitario, amplio, diverso, con reconocimiento del lugar de las mujeres en el sindicalismo; no solamente a través de su compañera Teresa Flores sino que también reivindicando a otras sindicalistas como a la española, Belén de Sárraga que vino a Chile, y Luis Emilio Recabarren le abrió las puertas para que también pudiera recorrer los sindicatos”.
Rendir honor a una figura histórica tan ilustre como Recabarren, señaló, cobra mayor relevancia sobre todo en la actualidad: “En tiempos en que estamos presas de la interpretación y de la relativización respecto de los principios básicos del ejercicio de una democracia sana, donde la tolerancia y el respeto a la diversidad siempre tienen un fino límite que es no tolerar la barbarie, no tolerar lo intolerable. Cuando estamos frente a ese conflicto latente en nuestro país, sin duda que volver a ensalzar y levantar la imagen de líderes que fueron íntegros, que marcaron procesos muy trascendentales y transformadores en la historia de nuestro país, es un aporte, es un granito de arena en esta construcción de una historia que sea no, solamente, apegada a la verdad sino que también con los valores y principios más básicos que tiene nuestra sociedad y que constituyan el desarrollo de las naciones, de los países y de la democracia que es: El trabajo colectivo, el trabajo con el otro que es lo que da sentido al sindicalismo. No puede haber sindicalismo si no es porque hay un otro o una otra que confía en un compañero o compañera y que se decide avanzar juntos en una misma causa. Por lo tanto, en tiempos donde todo aquello se relativiza muchas veces y se pone en tela de juicio el sentido o donde está el límite de lo tolerable, no cabe duda que además es tremendamente oportuno hacer estos reconocimientos y estos homenajes”.