Nolberto Díaz, secretario General de la CUT y el consejero nacional a cargo de la Secretaría Campesina y de Pueblos Originarios, Osvaldo Zuñiga expusieron  en la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta, los argumentos para exigir que se debe dar marcha atrás en la insistencia de ratificar el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TPP-11)

En abril pasado, contraviniendo la demanda del mundo social, la Cámara de Diputados, en una estrecha votación, aprobó el proyecto de acuerdo de ratificar el TPP-11. De ahí, pasó al Senado donde la apuesta de las organizaciones sociales, sindicales, de derechos humanos y estudiantiles detractoras de este acuerdo, esperan que sea rechazado ya que son enfáticos en asegurar que es un tratado solo para garantizar a las transnacionales la seguridad de seguir aumentando sus ganancias a costa no solo de precarizar el trabajo también a costa de destruir las industrias locales, socavando soberanía económica. Además, aducen que no hay necesidad de llevar adelante este tratado pues Chile ya tiene acuerdos comerciales con los países que conforman el TPP 11.

EL TPP 11 –originalmente se llamó Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica– comenzó a negociarse en el 2010. Involucra a 11 países de la región Asia-Pacífico: Australia, Brunéi Darussalam, Canadá, Malasia, México, Japón, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, Vietnam y Chile. Cambió su nombre luego que Estados Unidos se retiró. Su sigla en inglés es CPTPP. Es un  TLC multilateral negociado con cláusulas de secretismo y suscrito –en febrero 2016 y luego marzo de 2018- sin consulta a los pueblos originarios, violando así el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Intenta imponer nuevas normas en industrias como la farmacéutica, textil, agrícola, automotriz,  informática, energía, minera apostando también por regulaciones laborales regresivas. Y si bien, luego de la salida de EEUU se le hizo modificaciones igual su esencia se mantiene.

Y es en este marco del debate que se está dando ahora en el Senado, el lunes pasado la CUT nuevamente planteó su rechazo, tomando principalmente tres aristas que serán impactadas: laboral, modelo agroexportador y restricciones a las empresas públicas. Díaz fue categórico en advertir que ratificar este tratado habrá un significativo retroceso de derechos laborales porque: “Restringe, obstaculiza y limita severamente los derechos laborales mínimos, porque solo identifica los derechos laborales mínimos firmados en el año 1988”.

Asimismo, despejó el mito que con este tratado se creerán miles de empleos, afirmando que con todos los TLC que tiene Chile hasta ahora, ni el empleo ni los salarios han repuntado significativamente: “En los últimos 30 años, en el sector agropecuario y agrícola se ha congelado el empleo, no ha crecido. Ustedes ahora me van a decir que después de 26 tratados de comercio que tenemos con 64 economías, sucede que ahora sí  va a crecer el empleo, ahora sí se van a mejorar las remuneraciones…por favor señores senadores, las cifras indican lo contrario”.

Zuñiga en tanto también fundamentó con datos del INE que: “Desde 1985 cuando despega el modelo agroexportador hasta hoy, el trabajo y la actividad agropecuaria y forestales se han estancado”. Tras su exposición respaldada con una serie de estadísticas, incluidas las de brechas de desigualdad en la distribución de la riqueza, concluyó que el modelo agroexportador: “No está respondiendo a la mayoría de nuestro país”.

Link CUT en la sesión de la comisión de RR.EE del Senado:

http://tv.senado.cl/tvsenado/comisiones/permanentes/relaciones-exteriores/comision-de-relaciones-exteriores/2019-06-10/162818.html

Plataforma Chile Mejor sin TLC: https://chilemejorsintlc.cl/16-razones-para-rechazar-el-tpp-11/