Este 23 de noviembre, en la sede del Colegio de Profesores de Copiapó se realizó la Ceremonia de Certificación de la “Escuela de Formación Sindical de Mujeres Líderes”, versión 2022, por parte de la Fundación FIEL y de la CUT provincial, en la cual se diplomaron un total de 47 dirigentas de la Región de Atacama.
En la ceremonia estuvieron presentes el presidente provincial de la CUT de Copiapó Emilio Díaz, junto a Julie Véliz, secretaria General, Jimena Pérez vicepresidenta, Cristina Rojas, vicepresidenta de la Mujer, las cuales fueron además alumnas de las Escuelas.
Además, participaron de la ceremonia la académica de la Universidad de Chile y docente de la Escuela, Antonia Santos Pérez, los consejeros/as nacionales Amalia Pereira Campos y Manuel Díaz Tapia, y por la Fundación, la directora Ejecutiva Ana Bell Jaras.
En el evento a nombre de las estudiantes se dirigió al público, la presidenta del Sindicato Unimarc de Copiapó Aurora Villafaña, quien destacó la importancia de la formación para el empoderamiento de los liderazgos femeninos en el ámbito sindical y social. Por su parte, el presidente de la CUT provincial también valoró la realización de iniciativa de formación y destacó la relevancia que tiene para la organización en la zona, en que cada día se incorporan mayor cantidad de mujeres a la vida sindical.
Ceremonia final: aumentar el liderazgo femenino sindical
En tanto, el 29 de noviembre se realizó una ceremonia final formal virtual con la participación del Departamento de Diálogo Social, que contó como principales oradores e invitados el director Regional del Trabajo de Atacama, Sergio Santibáñez, el presidente de la Fundación FIEL, José Pérez Debelli, la secretaria General de la CUT Copiapó, Julie Véliz, y el coordinador de Diálogo Social, Francisco Gómez.
En su mayoría los/as oradores, tanto de Gobierno como sindicales, destacaron la relevancia de dotar a las dirigentas de mayores competencias para elevar su liderazgo en el ejercicio de su tarea sindical, y representar las demandas de la mujer en el trabajo como las brechas salariales, las violencia, el maltrato, la falta de políticas públicas para el cuidado, todo lo que afecta las posibilidades y oportunidades de trabajo decente para las mujeres, y materias insuficientemente representadas o visibilizadas en las agendas sindicales.
Además, se destacó la necesidad de seguir invirtiendo en la formación en regiones, dotando de mayores recursos públicos para ello, en especial en una región como Atacama donde existen fuentes estratégicas de producción minera, y un alto nivel de servicios, y que por sus particularidades geográficas, ha sido más abandonada en estas materias, señalando a su vez la necesidad urgente de aumentar y fortalecer el liderazgo femenino sindical en la zona.