«Es de suma importancia que exista un lineamiento a reconocer y trabajar en un proceso de remediación, de transición y de reconocimiento a los trabajadores(as) contratistas, que hasta hoy son invisibles en toda encuesta o programa de salud. Hoy, somos víctimas de la discriminación más cruel e injusta que puede realizar un Estado sobre sus ciudadanos, pero no solo han envenenado al trabajador(a) sino que también a nuestro tesoro más preciado, nuestras familias, ya que somos vecinos de esta empresa en Concón, y de estas empresas en Quintero.
Así lo manifestó la Federación de Trabajadores Contratistas de ENAP Refinerías Aconcagua S.A. Concón-Quintero, Fetracon, denunciando las precarias condiciones en las que trabajan, sobre todo, en materia de seguridad y salud, lo que los ha impulsado a luchar por la Dignidad Contratista: «La salud física y psicológica, junto al tiempo, son unos de los bienes más preciados que podemos tener en la vida”, afirmó el secretario General de la Fetracon, Alejandro Ochoa, consejero nacional de la CUT, quien asumió la Subsecretaría de Medio Ambiente de la Central.
En un comunicado, la Fetracon recuerda que desde el año 2014, la organización tiene representantes en el Consejo de Recuperación Ambiental de Quintero Puchuncaví y Concón (CRAS); en el Consejo Regional de Medio Ambiente y fueron parte importante en la construcción del Programa de Recuperación Ambiental y Social (PRAS).
Y es, justamente, a través de estas instancias, que se percataron : «que no nos han entregado la información correcta y precisa (no cumpliendo con el DS40), incluso hasta hoy, sobre la exposición a gases que estamos expuestos (ejemplo, benceno) los trabajadores/as contratistas que nos desarrollamos en ENAP, tanto en Quintero como en Concón […]. Estamos convencidos que la gran mayoría de nuestros representados sufre afecciones a su salud causadas por la exposición no avisada a gases por los procesos propios de la refinación del petróleo; esto tanto en Concón y en Quintero son víctimas de los gases que se ventean y producen en el sector y de los propios grases que emanan del petróleo u otros derivados cuando se producen las descargas en la bahía. Y esta conclusión la hemos obtenido en la participación de los procesos en que fuimos parte ya mencionados, donde las empresas, incluso la misma Estatal ha confesado sobre sus emisiones, sumado a investigaciones que hemos obtenido de estudios que se han realizado en otras refinerías del mundo, cuyo proceso es igual, ya que el petróleo se refina de igual manera, solo con diferencias de tecnologías, justamente en materia de contención de emisiones y de evitar exposición peligrosa a “TODOS” y “TODAS” sus trabajadores que en ellas se desarrollan».
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