En una ceremonia cargada de simbolismo histórico y donde el mayor protagonista fue el llamado a la unidad y cohesión sindical, ayer 27 de febrero se realizó la ceremonia en homenaje a la muerte de Tucapel Jiménez Alfaro a manos de agentes del Estado de la dictadura militar. Esta actividad que se llevó a cabo en el Cementerio General, contó con a alocución del Presidente Gabriel Boric, el presidente de la CUT, David Acuña Millahueique, el presidente de la ANEF José Pérez Debelli, la presidenta de la AFEP, Alicia lira y el secretario de Derechos Humanos de CLATE, Humberto Correa.
Con gran emotividad y también desde el escenario, el nieto de Tucapel Jiménez Alfaro, Sebastián Jiménez expresó el desamparo que le ha producido no haber conocido a su abuelo, el que “no murió por causas naturales, sino por pensar distinto”, sostuvo. Asimismo, el hijo del presidente mártir de la ANEF, Tucapel Jiménez Fuentes, actual embajador de Chile de Suecia –vía remota- estuvo presente durante toda la ceremonia, resaltando que la manera de hacer justicia por la muerte de su padre es recordando su legado, como se ha hecho en esta ceremonia. Así, también se dirigió -por esta misma vía- Raúl de La Puente, quien encabezó por 20 años la ANEF, y el que luego de sus palabras recibió el cerrado aplauso de los asistentes.
En el escenario dispuesto a lo pies de la tumba de Tucapel Jiménez Alfaro, el Presidente de la República, Gabriel Boric, agradeció la invitación, relevando la importancia que tiene que “desde la institucionalidad expresemos nuestro respeto a la memoria histórica del sindicalismo chileno que tanto le ha dado a Chile”. En ese sentido, expresó que “los
avances que han tenido las y los trabajadores ha sido gracias a su organización”. Es en ese sentido, deseó el mayor de los éxitos al movimiento sindical, porque “el éxito del sindicalismo, de la organización de los trabajadores, es también el éxito del Gobierno”. Al respecto, el Mandatario dio cuenta de los avances de los proyectos de 40 horas semanales, del Convenio 190 de la OIT, la Reforma de Pensiones, el Sistema Nacional de Cuidados, iniciativas que son parte de la agenda de Gobierno y que han sido posibles “gracias al apoyo transversal del mundo de los trabajadores”.
En su presentación, el presidente de la CUT, David Acuña, destacó el legado de Tucapel Jiménez enmarcado con el principio de unidad y cohesión como una forma de avanzar en los derechos de las y los trabajadores. En ese sentido, recordó que el entonces presidente de la ANEF el día de su asesinato encabezaría una reunión con el fin de crear
un frente laboral unitario de oposición al régimen militar. “Fue la capacidad movilizadora y de cohesión, su diálogo con claridad y franqueza sobre las demandas de las y los trabajadores que lo convirtió en una amenaza para la dictadura militar”, recalcó Acuña, enfatizando que el dictador “intentó destruir el mundo sindical y desarticular la unidad de las y los trabajadores, unidad por la que nuestro compañero luchó y la que hoy es una guía en nuestro quehacer”. En esa línea, recalcó que “tenemos el desafío de continuar con su legado y no solo trabajar con unidad, sino que también con cohesión, debemos combatir la atomización sindical, debemos orientar nuestro trabajo a quienes son sujeto del sindicalismo, que son nuestros afiliados y afiliadas”.
El presidente de la ANEF, José Pérez Debelli, agradeció la presencia de las autoridades de Gobierno presentes, dirigentes de agrupaciones de Derechos Humanos y de organizaciones sindicales y reafirmó el 2023 como el año sindical. En su intervención, destacó el legado de quien fuera presidente de la ANEF hasta el día de su muerte, afirmando que “la figura de Tucapel se transforma en una real amenaza para el régimen, por lo cual deciden asesinarlo con la mayor brutalidad utilizada como ejemplo para infundir terror para quienes quisieran seguir su senda”, remarcó. En ese aspecto, Pérez dijo que al igual que en el pasado, “hoy reafirmamos nuestro compromiso por la defensa y los derechos humanos, donde el Estado garantice efectivamente su protección, otorgue reparación real y garantías de no repetición. Sin embargo, el desafío para el sindicalismo es enorme”, por lo que instó a revalidar las demandas instaladas en el proceso constituyente anterior como la negociación colectiva, la huelga del sector público y
privado, el trabajo decente y el dialogo social, entre otros.
A la ceremonia –en el Cementerio General donde reposan los restos de Jiménez- además de los invitados que entregaron sus saludos, asistieron la ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, el ministro de Desarrollo Social y Familia, Georgio Jackson, además de subsecretarios, presidentes de partidos políticos y representantes del Congreso Nacional.