No solo Chile también gran parte del mundo se prepara a conmemorar el Día Internacional de los Trabajadores/as en un escenario inédito ya que no se había dado nunca en los últimos 131 años desde que se instauró este Día del Trabajo, pues la estrategia que hasta ahora ha tenido mejor rendimiento para frenar la veloz propagación planetaria del Coronavirus, es el distanciamiento y aislamiento social, restringiéndose así, todas las convocatorias masivas de miles de personas en pro de resguardar la salud de la población.
Por lo tanto, las postales de multitudinarias concentraciones y marchas de millones y millones de trabajadores y trabajadoras, abriéndose camino por las principales ciudades del mundo, no podrán verse en este 1° de Mayo, 2020 en gran parte del planeta. Pero pese a estas restricciones por el inminente contagio del Coronavirus, la clase trabajadora de nuestro país, de todas maneras, debe buscar las formas de reivindicar no solo las luchas del movimiento obrero a lo largo de su historia, sino también manifestarse – pero sin poner en riesgo la salud- en este presente aciago para exigir que esta crisis sanitaria no la paguen los trabajadores y trabajadoras.
En ese contexto, la Central Unitaria de Trabajadores, CUT Chile, lanzó este domingo, la gráfica que acompañará este 1° de Mayo con la consigna: “Las personas primero: Defendamos la vida con salario y trabajo decente”. Especial énfasis en exigir un giro en el manejo de la crisis sanitaria por parte del Gobierno de Sebastián Piñera que, aprovechándose de la incertidumbre y aislamiento de la población, está impulsando leyes y normas que solo están precarizando aún más las condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras de nuestro país.
Las actividades oficiales programadas para este 1° de Mayo por la CUT, contemplan el discurso de la presidenta de la Central, Bárbara Figueroa, vía streaming –a las 10:30 horas- que será transmitido por las redes sociales de la CUT y su sitio web (cutchile.cl) Así también se está convocando un Banderazo de luto: Colgar, desde las primeras horas de la mañana del viernes 1° banderas negras en los frontis de las casas, edificios y lugares de trabajo, en señal de protesta por la ola de despidos y desprotección de la población ante un Gobierno que solo está legislando para resguardar los intereses de los empresarios. A las 19:00hrs. transmitiremos el Concierto de Solidaridad Internacional desarrollado junto a otras centrales sindicales del mundo, y a las 21:00 horas, un gran Cacerolazo por la Dignidad que se hará sentir a lo largo del territorio nacional para exigir medidas sanitarias, económicas y de protección del empleo y salario implementadas de manera integral.
Eric Campos, vicepresidente de Comunicaciones de la CUT, junto con formular un llamado a los trabajadores y trabajadoras del país a sumarse no solo a la transmisión de las 10:30 horas sino también a: “ser activos en la protesta” a través del Banderazo Negro y Cacerolazo, enfatizó que: “Este 1 de mayo para los trabajadores, las personas están primero y por eso defendemos la salud con salario y trabajo decente”.
Asimismo, habrá programas especiales “1° de Mayo 2020”, a través de radioemisoras de las comunas de: Paine: (sectores de Hospital, Champa y Colonia Kennedy) Radio Matilde, dial 105.5; Buin, Radio Camila, dial 107.1; San Bernardo, Radio 5 Pinos; Http/www.5pinos.cl/ y la CUT Provincial Maipo tendrá un micro programa por Skype, a partir de éste Lunes 27 de Abril, a las 11:00 horas.
1° de Mayo del año 1886
Conseguir la jornada laboral de ocho horas, fue una lucha dura y sangrienta. El 1° de Mayo de 1886, los trabajadores de Chicago (EEUU) dieron muestra de ello. Ya en junio de 1868, el Presidente de los EEUU, Andrew Johnson había promulgado la jornada laboral de 8 horas (Ley Ingersoll). Sin embargo, algunos estados y los empleadores se negaban a cumplirla y seguían imponiendo jornadas de 12, 14 horas. Los trabajadores de la ciudad industrial de Chicago se revelaron entonces y, en un principio, entre 50 mil y 80 trabajadores iniciaron una huelga, pero pronto el movimiento desembocó en una huelga nacional. Según reportes de la época, más de 400 mil obreros se movilizaron. El punto álgido fue el 4 de mayo 1886, cuando revienta la llamada “Revuelta o atentado de Haymarket” en las inmediaciones de la fábrica Mc. Cormik: Allí se produce una brutal represión que terminó con 38 muertos y 200 heridos. Se declaró Estado de Sitio, se detuvo a cientos de trabajadores. El 21 de junio 1886, comenzó el juicio contra 31 obreros acusados de promotores de la revuelta. La lista finalmente se redujo a 8 y pese a tener un juicio sin apego a la norma jurídica y sin pruebas en su contra, 3 de ellos fueron condenados a prisión y cinco a la horca.
Ellos son los “Mártires de Chicago”. Y en honor a ellos y en respaldo al sentido de sus luchas, es que, en su congreso, la Segunda Internacional (celebrado en París, Francia, 1889) instituyó, desde el 1° de Mayo de 1889, el Día Internacional de los Trabajadores: la gran conmemoración anual del movimiento obrero mundial.
La trascendencia y trasfondo de los hechos históricos que dieron origen a la conmemoración del 1° de Mayo, siguen teniendo vigencia en pleno Siglo XXI. Es por eso que honrar la historia del movimiento obrero mundial, y el de Chile en particular, es un deber ético y colectivo más aún cuando se trata de las luchas de trabajadores y trabajadoras que dieron su vida por defender y conquistar derechos básicos que hoy, en nuestro país, se ven amenazados por el manejo que está haciendo de esta crisis sanitaria, el Gobierno de Piñera.
Este 2020, será un año que quedará marcado a fuego por el tremendo impacto negativo en la estabilidad de los empleos y salarios, generado por el cómo han administrado esta pandemia los países golpeados por la propagación del Coronavirus. De acuerdo al informe del 8 de abril pasado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) la pérdida de horas laborales fue: “…de 6,7%, equivalente a 195 millones de trabajadores a tiempo completo en el segundo trimestre de 2020”; en América Latina y El Caribe: “…la pandemia causa la pérdida de 5,7% de las horas de trabajo en el segundo trimestre de este año, lo que equivale a 14 millones de trabajadores a tiempo completo”.