Este miércoles, la presidenta de la CUT, Silvia Silva, expuso ante la Comisión de Derechos Fundamentales de la Convención Constitucional (CC), los principales lineamientos tanto de la Iniciativa Popular de Norma Constitucional (IPNC) de la Central, que obtuvo más de 16 mil apoyos ciudadanos, y de la Iniciativa de Norma, también de la CUT, patrocinada por un grupo de convencionales. Ambas buscan consagrar en el corazón de la nueva Carta Magna, el valor del Trabajo, del Trabajo Decente por sobre todas las cosas, y con ello garantizar la protección de los derechos fundamentales en el ámbito del trabajo. Junto con Silva, intervino Pablo Zenteno, abogado investigador de la Fundación Instituto de Estudios Laborales, FIEL-CUT.
«Sin duda, está en manos de esta Comisión, que en la nueva Constitución -junto al Principio de Trabajo Decente- queden consagrados los derechos que lo materialicen: empleo no precario, formal, seguro y adecuadamente remunerado. Y también pueden -estimadas y estimados convencionales- deshacer algunos de los daños que hizo la Dictadura a la acción colectiva y contribuir a fortalecer el sindicalismo, tomando nota del reconocimiento mundial respecto del rol redistributivo y de equidad que tienen las organizaciones fuertes de trabajadoras y trabajadores«. Así lo enfatizó la presidenta de la CUT, Silvia Silva, este miércoles en audiencia con las y los miembros de la Comisión de Derechos Fundamentales de la Convención Constitucional (CC) quien expuso el espíritu de la Iniciativa Popular Constituyente Nº 28-4 sobre reconocimiento y promoción del Trabajo Decente, la que recoge los planteamientos tanto de la Iniciativa Popular de Norma Constitucional (IPNC) de la CUT: «Una Constitución para las y los Trabajadores de Chile», que logró los más de 15 mil apoyos ciudadanos que se requerían para que sea discutida en la CC, y de la Iniciativa de Norma, también de la CUT, patrocinada por un grupo de convencionales. La exposición la compartió con el abogado investigador de la FIEL-CUT, Pablo Zenteno. Ambos textos son fruto del trabajo colectivo de la Central, que fue recogido y redactado por un Consejo Asesor de la CUT, presidido por Juan Somavía, ex director de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dando origen a la Propuesta Constitucional del Mundo Sindical.
Silva recordó en la ocasión que: «Nuestra Iniciativa Popular de Norma por una Constitución de las y los Trabajadores, ya ha avanzado en la Comisión de Sistemas de Justicia, con la creación de una judicatura laboral; y también en la Comisión de Principios Fundamentales, donde se establece el reconocimiento del Trabajo Decente y su protección», enfatizando la firme convicción en que el Trabajo: «Debe estar al centro del Chile que queremos, que se debe valorar con justicia el esfuerzo de hombres y mujeres que miden sus capacidades, generan riqueza y obtienen el sustento para sus familias».
En tanto, Zenteno afirmó: «El objetivo de la CUT es poner el valor del trabajo al centro de la Constitución. Y para eso, consagrar el paradigma del Trabajo Decente. Este paradigma tiene como fundamentos: la dignidad, equidad, seguridad social y libertad», explicando que el concepto si bien lo posicionó la OIT, este también venía consolidándose con el llamado «constitucionalismo social, que tiene como fundamento para la paz, la justicia social».
Las y los convencionales formularon una serie de preguntas a los expositores, entre ellas sobre qué derechos están asociados al principio del Trabajo Decente. Al respecto, Zenteno enumeró los más destacados, entre los cuales: «Reconocimiento de todo tipo de trabajo, una cuestión relevante respecto de la protección del trabajo; la no discriminación en materia laboral, directa o indirecta; mandato específico al legislador respecto de la institucionalidad laboral que se va a hacer cargo, particularmente de órganos fiscalizadores, de tribunales de justicia, procedimientos y principios que deben orientar; principio de protección y estabilidad en el empleo (…); libertad sindical universal para el sector público y privado. En ese sentido, nos enmarcamos en los Convenios OIT 87 y 98 y las recomendaciones de los órganos de control de la OIT; Sindicalización autónoma en términos reglamentarios de quienes va a ser los dirigentes que elija la propia organización sindical (…); Negociación Colectiva Multi Nivel. Es muy importante que en Chile, la Constitución haga una referencia, un mandato específico a la posibilidad de que el Estado se comprometa con la Negociación Colectiva Ramal. No estamos diciendo que el Estado sea el que participe en la Negociación, porque es algo que les corresponde a las partes, a los actores sociales: empleadores y trabajadores (…). El Estado, a partir de la Constitución, debe tener no solamente una labor promotora, sino que de fomento de la Negociación Colectiva Ramal; la Huelga, es fundamental que quede consagrada como un derecho fundamental efectivo, reconocemos la existencia de los servicios esenciales, por cierto hay otros derechos tan importantes como la huelga en una sociedad moderna y democrática, pero los derechos fundamentales conviven, entendemos que el derecho a la huelga, tiene que convivir con la vida, la salud, la seguridad de la población, sin embargo, los trabajadores deben tener la posibilidad de definir el ejercicio y el espacio en el cual usar esta herramienta fundamental para la defensa de sus derechos; un modelo de Seguridad Social consagrado con todos los principios universalidad, sustentabilidad entre otros».
Asimismo, agregó temas con enfoque de género, como: «La no discriminación en materia de salario, pero con mandatos específicos en toda materia laboral, los planes de igualdad al interior de las empresas, la paridad en términos de cómo se estructuran las distintas instituciones son fundamentales, y esto está reflejado en varias ideas de nuestras propuestas».
Tras finalizar la sesión, Silva afirmó: «Hemos quedado bastante satisfechos y alimentando la esperanza de poder dejar plasmada en la nueva Constitución nuestra Iniciativa Popular de Norma, la que avanza a pasos firmes y agigantados. Y es por esto que nos mantenemos firmes en la convicción de seguir luchando por la clase trabajadora. Y en esta instancia, queremos hacer un llamado enérgico a todos los convencionales a seguir comprometiéndose con la Clase Trabajadora representada en la Central».
Zenteno, afirmó: «Pudimos destacar los aspectos más relevantes, que son entre 10 y 12 aspectos. Y esto es importante porque inicia un camino ya de discusión en concreto de nuestra propuesta, que esperamos pueda ser la base en la nueva Constitución en la construcción de un nuevo modelo de relaciones democrático, el centro puesto en el valor del trabajo y, por cierto, con la consagración del paradigma del Trabajo Decente».
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