Continúa la toma de las dependencias del Liceo José Victorino Lastarria por parte de los alumnos, quienes están protestando no solo por el reintegro de estudiantes acusados de acoso sexual (vinculados al caso «la manada», grupo de estudiantes que amenazaba con violaciones grupales a través de un chat común) también por los problemas de infraestructura, entre otras falencias.
«Los estudiantes realizan toma debido al reintegro de alumnos acusados de acoso sexual, sin sanciones y sin reunión con centro de padres y alumnos, situación que provocó descontento debido a que posteriormente se provocaron enfrentamientos que involucraron a otros estudiantes del liceo, incluso jóvenes de educación básica corriendo peligro la integridad de todos los alumnos. Esto y otras demandas como infraestructura deficiente, falta de docentes, provocó este quiebre y los alumnos insisten en que se lleguen acuerdos que ayuden y favorezcan una vuelta a clases digna, segura y sin precariedad docente», explicó una delegación de la CUT Zonal Oriente que llegó, junto al vicepresidente de Organización de la CUT, Leonel Sepúlveda, y a la consejera nacional, Amalia Pereira, hasta el recinto estudiantil.
«La CUT Zonal Oriente, consciente de esta situación, contactó a los respectivos centros de alumnos y padres para proporcionar alimentos no perecibles, frazadas para los jóvenes que están en esta toma día y noche, solicitando ser escuchados por las autoridades correspondientes. Los jóvenes necesitan útiles de aseo y alimentos no perecibles porque la toma continuará mientras no se llegue a acuerdos», señaló la Zonal, encabezada por María Angélica Soto.
La ayuda se concretó el pasado viernes: «Fuimos a dejar frazadas y alimentos. Nuestras compañeras , compañeros de FENATS prepararon un gran botiquín, con varios insumos. Nuestra CUT nacional apoyó con caja de mercadería para los jóvenes que están en paro indefinido».
