Expertos internacionales coinciden que es el momento de reabrir el debate por sistemas tributarios progresivos con impuesto a los súper ricos para enfrentar la crisis sanitaria que está teniendo un impacto de enorme magnitud no solo en el ámbito sanitario también en el económico y social.
Así quedó de manifiesto en el seminario “Panorama internacional del impuesto a los súper ricos”, realizado este martes, vía on line. El evento fue organizado por la Fundación Friedrich Ebert (FES) en conjunto con la Central Unitaria de Trabajadores, CUT Chile; Fundación Instituto de Estudios Laborales, FIEL; la Agrupación Nacional de Empleados Públicos, ANEF; Asociación Nacional de Funcionarios de Impuestos Internos de Chile, ANEIICH; Asociación de Fiscalizadores del Servicio de Impuestos Internos AFIICH y la Internacional de Servicios Públicos, PSI
Todos gremios que están impulsando la campaña “Impuesto X la Dignidad” mediante la cual apoyan el proyecto de ley que crea un impuesto transitorio al patrimonio de las grandes fortunas del país. La semana pasada, se inició el debate en la Cámara de Diputados. El cuerpo legislativo, establece un impuesto equivalente al 2,5% del patrimonio igual o superior a US$22 millones, con el objetivo de generar mayores recursos y que las y los trabajadores no sigan pagando el costo de la crisis. El establecimiento de este impuesto podría generar recursos al Fisco equivalentes a US$6.500 millones.
La apertura estuvo a cargo de la FES, a través de Arlette Gay quien valoró esta alianza con los sindicatos del país: “…para impulsar esta siempre compleja discusión, especialmente en un país con las particularidades de Chile”.
La presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa también estuvo presente, destacando este tipo de seminarios toda vez que aportan insumos desde la experiencia internacional. Asimismo, resaltó la necesidad de que los sindicatos participen en los debates de políticas públicas: “…y no solo tengan una voz principal los gobiernos, los partidos, los estados, los actores de la institucionalidad política, sino que también los actores sindicales seamos incidentes”. Así también enfatizó que se requiera para el país: “Respuestas mucho más audaces que las que se han propuesto hasta ahora (…) Enfrentar este debate que recién comienza en nuestro y esperamos tengan una gran altura de miras a la hora de ser abordado en los espacios institucionales como el Congreso y el propio Gobierno”.
El evento online estuvo moderado por Ricardo Martner, miembro de Comisión Independiente para la Reforma de la Fiscalidad Corporativa Internacional, ICRICT y ex jefe de Asuntos Fiscales de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL. Los panelistas invitados fueron: el ex ministro de Hacienda y Primer Viceministro de Australia, Wayne Swan; la jefa del departamento Justicia Fiscal de Oxfam, Susana Ruiz y María Fernanda Valdés, doctora en Economía de la Universidad Libre de Berlín.
En este contexto y ante la consulta del moderador de cuáles han sido los esfuerzos de los países de avanzar hacia sistemas tributarios más progresivos e impuesto a los súper ricos para enfrentar la crisis y desigualdades, Swan en su intervención afirmó que: “En esta pandemia, que nos ha afectado de la manera más dura en los últimos 30 o 40 años, una forma de salir es a través de impuestos que consideren una tributación progresista junto con gasto público”.
Y agregó que: “esta crisis nos da la oportunidad para volver a los derechos básicos que todos hemos estado defendiendo. Este tipo de impuestos (progresivos) ayudaron a impulsar la prosperidad y el crecimiento económico, por eso pienso que es una buena oportunidad ahora de retomar el debate tributario y que no haya la demonización de los gobiernos”.
En esta misma línea, y considerando las recomendaciones de Oxfam para América Latina, Ruiz señaló que: “si este es el grupo (súper ricos) de la sociedad que ha sido menos tocado por la crisis económica y que tienen una mayor capacidad de recuperación, es justo también que la respuesta a la crisis suponga mayor esfuerzo por parte de estos actores y una de las iniciativas que planteamos es un impuesto a las grandes fortunas, al patrimonio, entre un 2,5% y 3,5% en todos los países de Latinoamérica, que permitiría recaudar un 2% del PIB de la región”.
Asimismo, la doctora en Economía, María Fernanda Valdés sostuvo que: “en las constituciones debería aparecer al menos el mandato de que los impuestos deben ser progresivos (…) En la discusión que se está dando en Chile no solo debería ser un principio Constitucional, sino que debería hablar de herramientas de cómo podría hacerse real ese principio, ahí lo vital (que no tenemos en Colombia) es el tema de la transparencia. Nosotros hemos pedido que cada año se saque un informe de equidad tributaria que, con una metodología estándar, se replique año tras año para saber cómo está avanzando ese tema”.
Al mismo tiempo aseguró que, a diferencia de Colombia, la discusión hoy en Chile es de un impuesto a los súper ricos por única vez, por lo que se evitaría cualquier posible planificación de evasión del mismo y tendría un efecto recaudatorio directo para los fines de enfrentar la crisis.
Revive acá transmisión del seminario