Según datos de Carabineros, en la Región de Antofagasta hasta el 4 de diciembre pasado se reportaban 1.286 casos con mujeres afectadas, que superan a los de 2021.
El Mercurio de Antofagasta
Los crecientes casos de violencia intrafamiliar ocurridos en el país, que han incluido denuncias encubiertas de mujeres para evidenciar a sus agresores, registran también un progresivo aumento de casos en la creciente población migrante.
Una realidad invisibilizada, según reconocen expertos, que añade como una condición de mayor vulnerabilidad el desconocimiento de las redes de apoyo y protección existentes para mujeres extranjeras afectadas por este tipo de agresiones. «Hace un mes conocí la historia de Ana (no es su nombre real). Ana llegó hace varios años desde Colombia al norte de Chile con sus dos hijos. Llegó sin conocer a nadie y a realizar un trabajo informal, precario y mal pagado. Se casó con un chileno y al poco tiempo comenzó a ser violentada sicológica y físicamente por parte de él (.) Sin contactos ni dinero para poder encontrar un nuevo lugar donde vivir y comenzar desde cero, Ana sigue viviendo en la misma casa que su victimario. Atrapada, asustada, sin tener dónde ir», comenta la economista Claudia González, encargada del proyecto «Empoderando a Mujeres Migrantes con la Violencia de Género».
«Es importante exponer cuán invisibilizadas están todas estas circunstancias que limitan el acceso de las mujeres migrantes a la protección del Estado chileno. Especialmente cuando la nueva ley de migración, tiene un artículo específico que promueve su protección independientemente de su estatus migratorio. Necesitamos escucharlas, hablar más de esto, y dar una respuesta desde el Estado a sus necesidades», agrega González.
Según datos de Carabineros, desde enero hasta el 4 de diciembre pasado se registraron a nivel país 121.795 casos de violencia intrafamiliar con mujeres como víctimas. Un registro que considera 9.143 casos que involucran a mujeres migrantes. Mientras que en este mismo período se reportó un total de 5.065 delitos por esta causa en la Región de Antofagasta. De esta cifra, 1.286 casos de violencia intrafamiliar correspondieron a casos de mujeres migrantes. Un registro que supera los 1.249 casos reportados en todo 2021.
El coronel de Carabineros, Álvaro Muñoz Sepúlveda, prefecto de la prefectura de Antofagasta, coincide en el mayor grado de vulnerabilidad de víctimas de VIF de migrantes. Una realidad que, según reconoce, se agudiza en quienes cuentan una permanencia reciente en el país. «Si hacemos un recuento del año 2022, de enero a diciembre de este año, del total de denuncias por violencia intrafamiliar, el 22% de estas denuncias han sido realizadas por personas extranjeras, y el 77% por personas chilenas. Se observa, efectivamente, que cuando este extranjero lleva poco tiempo en Chile, y no es una persona con domicilio habitual, sufre de algunas carencias. Primero que todo, tener un desconocimiento de cuáles son los procedimientos en Chile, de cuáles son los estamentos que le pueden brindar apoyo. Por esto mismo, uno podría generarse la impresión de que esta misma situación dificulta que las personas afectadas de violencia intrafamiliar realicen las primeras denuncias», comenta el coronel de Carabineros, Muñoz Sepúlveda, sobre los casos reportados tanto en la provincia de Antofagasta y Tocopilla.
«No obstante, una vez recepcionadas estas nosotros realizamos todos los trámites correspondientes, ya sea en el Ministerio Público o, según la dimensión de la denuncia, con la participación de la oficina de Asuntos de la Familia, donde carabineros cumplen una función especializada y que han sido capacitadas para brindar una atención y orientación especial a las personas que han sido víctimas de violencia intrafamiliar», agrega.
Hechos flagrantes
Según explica el prefecto de la prefectura de Antofagasta en caso flagrante de este tipo de delitos, solo por el hecho de presumir que al interior de un domicilio pudiera ocurrir un caso de VIF, Carabineros cuenta con las atribuciones legales para ingresar a este domicilio sin mantener la orden de algún tribunal.
«El mayor número de situaciones de violencia intrafamiliar ocurren, desafortunadamente, en intramuros, al interior de sus propios domicilios. Esto de alguna manera dificulta en ocasiones descubrir estos episodios de violencia, ya que aunque estos hechos sean escuchados por vecinos, en ocasiones no quieren verse involucrados luego en tribunales, lo que dificulta la acción de Carabineros. La mayor de los hechos se relacionan con excesos de celos, de un consumo previo de alcohol o de drogas, que origina el cambio de personalidad del agresor, quien luego termina agrediendo la víctima», afirma el coronel de Carabineros Muñoz Sepúlveda. Según este Prefecto de Carabineros en casos de violencia de género sufrida por mujeres que pernoctan en rucos o espacios públicos resulta complejo continuar con estos procedimientos judiciales debido a que estas personas no poseen un domicilio fijo y se encuentran en permanente movilidad.
«Las estrategias de Carabineros han sido reforzadas, tanto las oficinas de Atención Comunitaria como la de Asuntos de Familia, para orientar a las personas sobre las redes de apoyo de las distintas instituciones públicas. En forma paralela, en forma permanente estas junto a las organizaciones sociales y juntas de vecinos generando espacios de difusión, con el fin de incrementar este tipo de denuncias y evitar situaciones que pudiesen terminar en un lamentable femicidio», agrega.